Como parte del lanzamiento de la nueva familia motorola edge 60, Motorola Perú presenta “Congelados”, una campaña de marketing disruptiva que lleva el concepto de resistencia extrema al espacio menos esperado: los congeladores de un supermercado.
La acción se desarrolla en alianza con plazaVea, y tiene como objetivo destacar que los nuevos smartphones cumplen con estándares Military Specs*, es decir, están diseñados para soportar condiciones exigentes, incluyendo temperaturas extremas.
Con un enfoque 100% contextual, la campaña interviene vitrinas, zonas de pescadería y congeladoras en cinco tiendas estratégicas del retailer (Santa Clara, Comas, San Juan de Lurigancho, Izaguirre y Puente Piedra), donde se concentra la mayor rotación del producto. Estos espacios, que representan más del 70% del layout de exhibición, se convirtieron en el escenario perfecto para comunicar la robustez del motorola edge 60 de forma visual, directa y memorable.
“Con ‘Congelados’ buscamos salir de lo convencional y llevar la tecnología al espacio cotidiano del consumidor, generando una experiencia cercana y sorprendente. Esta campaña refleja nuestra apuesta por la creatividad local y por comunicar atributos técnicos como la resistencia de una forma auténtica y memorable”, comentó Mónica Vegas, Brand Manager de Motorola en Perú.
Además, la experiencia se traslada al entorno digital a través de un QR en los puntos de frío, que dirige a los visitantes a una landing page dentro del sitio de Plaza Vea, donde los productos también están “congelados” gráficamente, alineados con el concepto creativo de la campaña.
Activación en tiendas y promoción exclusiva
Entre el 14 y el 30 de junio, la campaña suma una activación experiencial en tiendas físicas de Santa Clara, Comas, San Juan de Lurigancho e Izaguirre, donde un activador caracterizado como “esquimal Motorola” interactúa con los consumidores e invita a conocer más sobre los equipos. Además, en todas las tiendas de plazaVea a nivel nacional, Motorola ofrece una promoción especial por tiempo limitado: por la compra de cualquier equipo de la familia motorola edge 60 o motorola razr 60 + S/1, los clientes podrán llevarse un helado Peziduri de 2.2 litros.
Con esta acción, Motorola refuerza su compromiso con la creatividad local, el uso estratégico del punto de venta y la conexión emocional con los consumidores a través de experiencias diferentes y memorables.
Para ver el video de la campaña en redes sociales, haz clic aquí.
* Estándar MIL-810H, durabilidad de grado militar
Si trabajas o viajas con frecuencia a lugares de frío extremo, calor, humedad, lluvia intensa, o si crees que por determinados motivos tu dispositivo podría sufrir golpes y caídas, la solución es buscar un smartphone MIL-STD-810H.
El estándar militar MIL-STD-810H, también conocido como MIL-810H, certifica que el dispositivo ha superado ciertas pruebas de durabilidad desarrolladas por el Departamento de Defensa de Estados Unidos para evaluar la resistencia de equipos y dispositivos en condiciones ambientales extremas:
- Temperatura: exposición a temperaturas altas y bajas, así como a cambios bruscos de temperatura
- Humedad: funcionamiento en entornos con alta humedad o fuertes precipitaciones
- Vibración: resistencia a choques y vibraciones, como los que se producen en vehículos o aeronaves
- Altitud: funcionamiento a gran altitud, donde la presión atmosférica es baja
- Polvo y arena: protección contra la entrada de partículas finas que podrían dañar los componentes internos
- Radiación solar: resistencia a la exposición prolongada a la luz solar directa
- Salitre: funcionamiento en entornos marinos con alta concentración de sal
Conseguir esta certificación implica superar múltiples pruebas de resistencia extremas, como funcionar a temperaturas de hasta 60°C, algo que podría ocurrir, por ejemplo, si se olvida el smartphone en un coche aparcado bajo la luz directa del sol.
Por otro lado, resiste temperaturas de congelación de hasta -20°C. Además, el smartphone resiste la lluvia directa, una humedad elevada y altos niveles de salinidad (no agua de mar), algo habitual en las regiones costeras.